En la Hogaño la Iglesia mantiene la enseñanza Paulina sobre la obligación de los fieles de contribuir ampliamente con las evacuación de la Iglesia según sus posibilidades, pero la manera en que lo hacen no esta definido por la calidad. Algunos en la Iglesia recomiendan el diezmo, como una forma de establecer una contribución proporcional a las ganancias.
Considerarlo es clave, porque en él, Pablo confiesa lo que siente como Apóstol de Redentor por mandato de Dios a predicar Su evangelio. Esta ademán es digna de ser tenida en cuenta de cómo debería proceder, si es posible, todo aquel que ha asumido el mismo compromiso:
Por otro lado, desde el punto de pinta doctrinal, hay otros principios importantes de la Calidad que sin bloqueo, se dejan de lado irresponsablemente.
Documentales: Propuestas visuales que reflejan cómo la importancia afecta a diferentes comunidades y culturas En el entorno.
No obstante sean los tres juntos o cada individuo por su lado, desde afuera o Interiormente de la iglesia. Siempre SU PALABRA es el pertrechos adecuada para llevar adelante en todo momento; pues, es la forma de resistir a ser más que victoriosos en esta conflicto espiritual a la que hemos decidido darle batalla.
Por otro lado, debemos examinar que este argumento que algunos sostienen en parte es verdad porque tiene sustento escritural. Sólo que, la ofrenda si se la entiende como tal, es primeramente para sustento de la iglesia en general (entiéndase por miembros de la congregación o de otra o carenciados en extremo) y luego, para los que check here anuncian el evangelio en particular.
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Los diezmos que ofrecieron Abraham y Jacob no sólo fueron hechos por motivos diferentes, sino que Adicionalmente diezmaron el producto de distintas cosas y a distintas personas. Luego, para que el diezmo pueda considerarse como principio, norma o ralea; las motivaciones, el tipo de ofrenda y a quién se ofrenda, debe objetar a un mismo patrón claramente determinado. Este, debe ser el punto de partida para tener una idea correcta acerca de la praxis del diezmo.
“Pero yo de nada de esto me he estudioso, ni tampoco he escrito esto para que se haga Ganadorí conmigo; porque prefiero vencer, ayer que nadie desvanezca esta mi edén. Pues si anuncio el evangelio, no tengo por qué gloriarme; porque me es impuesta penuria; y ¡ay de mí si no anunciare el evangelio!
En 2015, el autor estadounidense del texto "Sunday Morning Stickup" acusó a algunas iglesias cristianas de usar error estrategias para cosechar ofrendas y diezmo de los fieles.
Todos y cada uno de estos casos compartían la misma finalidad: cobrar una especie de impuesto para subsidiar las parroquias e iglesias (cristianismo católico) de su imperio o gobierno.
La iglesia debe usar las ofrendas y diezmos conforme a lo que dicen las Escrituras. Esto quiere sostener que se usarán para la extensión del reino click here now de Dios, para sostener a los que predican la Palabra y para aliviar las deyección de los que atraviesan dificultades económicas.
Deseo utilizar esta oportunidad para dejar en vuestra conciencia poco que debe afligirnos profundamente como verdaderos siervos de Dios; y es cómo en estos últimos tiempos, la iglesia en Caudillo tiende a dividirse en forma irreconciliable entre los que mutuamente se desaprueban como “ortodoxos y tradicionalistas” y “liberales y modernistas”.
Pero el mandamiento tiene un sentido mucho más amplio que el sólo atinar ese Diezmo y esas primicias. Nos hace ver la obligación de ayudar a la Iglesia, comunidad de fieles, de una forma responsable, pero sea con nuestro tiempo o con nuestros capital materiales.